Me encanta el dinero y desprecio a los miserables

Últimamente estoy siendo muy sincero con mis palabras, y frases que espontaneamente se salen, en más de una ocasión, me traen problemas, pues una vez dichas, ya no las puedo borrar, en ocasiones digo frases muy despectivas, demasiado, pues, como tengo dinero, muy por encima que el resto de mis amigos de la universidad, además de ello, tengo todo el tiempo del mundo para dedicarme a los estudios, o para lo que yo prefiera, a diferencia de ellos que trabajan y estudian, me han llevado en más de una ocasión a despreciarlos, de forma involuntaria pero sincera y es que comprendo sus miserables vidas, analizo que ellos, estudian no por aprender, sino por necesidad.

Ellos piden prestado dinero, te piden que les invites, aunque hay algunos, que a mi parecer, son ejemplos a seguir, antes de pedir invitado o prestado para no devolver (estos son aún más miserables que los primeros) prefieren pasar hambre a mancillar su dignidad, pero hay otros que llegan a casos extremos, como si la dignidad no significase nada para ellos.

Miserable no es aquel que no tiene dinero, es aquel que no le importa estropear su dignidad para conseguir cosas que con un poco de esfuerzo, podría omitir adquirir.

Yo, siempre que necesito (solo pido prestado en emergencias) dinero, no en muchas ocasiones a lo largo del año, cumplo puntualmente con pagar, sin necesidad de que me cobren, eso es de caballeros! tengo un sentido de dignidad muy desarrollado, gracias a mi orgullo, un ego colosal formado por todos los éxitos que me han acompañado a lo largo de mi fructífera historia, hoy cosecho lo que sembré, la cosecha de una vida, con valores, una vida ejemplar, siempre respetando a la dignidad, que es lo más bonito que uno puede tener.